La central obrera israelí declara la huelga general, incluido el aeropuerto, para protestar por el retraso «políticamente motivado» del acuerdo sobre los rehenes

El sindicato israelí Histadrut celebrará una huelga general el lunes en protesta porque el gobierno «retrasa un acuerdo para la devolución de los rehenes por razones políticas», declaró el domingo por la noche el presidente del sindicato, Arnon Bar-David.

Rodeado de representantes de las familias de los rehenes, Bar-David declaró: «Es imposible permanecer de brazos cruzados por más tiempo. El hecho de que se asesine a judíos en los túneles de Gaza es inaceptable. Tenemos que llegar a un acuerdo, un acuerdo es más importante que cualquier otra cosa».

La declaración del jefe del sindicato se produjo después de que el Foro de Rehenes y Familiares Desaparecidos anunciara anteriormente que realizarían docenas de protestas en todo Israel el domingo por la noche para «detener a la nación». El anuncio se produjo tras la recuperación de los cadáveres de seis rehenes asesinados en la ciudad meridional de Rafah, en Gaza, el sábado por la noche.

Bar-David continuó: «He hablado con mucha gente de la política israelí, con la gente de nuestro sistema de seguridad. El acuerdo no avanza debido a consideraciones políticas y eso no puede aceptarse. Hay que poner fin al abandono de los secuestrados, de los desplazados, de la economía en colapso.»

«Por eso mi decisión de que a partir de mañana a las 06:00 toda la economía israelí entre en huelga total», declaró.

La controvertida decisión de paralizar la economía para lograr un objetivo político recibió de inmediato una fuerte reacción, y numerosos municipios de todo el país anunciaron que no seguirían las instrucciones de Bar-David.

Entre ellos se encontraban Jerusalén, Ashdod, Netanya, Ramla, Dimona, Holon, Petah Tikva, Safed, Shlomi, Ma'alot Tarshiha, todos los municipios de Judea y Samaria, y otros.

La decisión de hacer huelga en el único aeropuerto internacional de Israel, así como en las escuelas, que comenzaron el nuevo curso escolar el domingo, fue especialmente controvertida.

Un portavoz de la Histadrut confirmó en un primer momento que el aeropuerto permanecería cerrado y que se interrumpirían todos los despegues y aterrizajes a partir de las 8 de la mañana durante un tiempo aún no especificado, informó el Times of Israel. Los medios de comunicación israelíes dijeron más tarde que la huelga se limitaba a dos horas debido a la reacción de los trabajadores del aeropuerto y los pilotos.

El Sindicato de Profesores dijo que todas las escuelas K-12 en Israel cerrarían a las 11:45 a.m. del lunes, excepto las escuelas para niños con necesidades especiales. Los jardines de infancia actuarán según el mismo horario.

El jefe de la Asociación de Directores de Universidad también dijo que las instituciones académicas se «unirían al cierre económico.»

«Los responsables universitarios reiteran su llamamiento al gobierno de Israel para que haga de la liberación de los rehenes la principal misión nacional», declaró.

Bar-David continuó su declaración: «Hago un llamamiento al pueblo de Israel para que salga a la calle esta noche y mañana abandone los centros de trabajo. Hago un llamamiento a todas las organizaciones económicas para que se unan a la huelga. Debemos gritar el grito de nuestra amada tierra: el grito de los secuestrados, los desplazados y los muertos».

Sharon Sharabi, cuyo hermano Eli sigue secuestrado en Gaza, se unió a Bar-David durante la rueda de prensa. Calificó la huelga de «acto noble».

Dirigiéndose a Bar-David, le dijo: «Has decidido hacer un acto que santifica los valores del pueblo de Israel, santifica la solidaridad y la garantía mutua. Este es el liderazgo que esperábamos, un acto que une a la derecha y a la izquierda y pone el foco en la vida humana. Esto no es un acuerdo, es un plan para salvar vidas, y el acto de Arnon deja claro que la primera prioridad son los rehenes».

Sin embargo, el Foro Tikva, que representa a las familias de los rehenes más beligerantes, denunció el anuncio como «una sentencia de muerte para los rehenes restantes y una recompensa para [el dirigente de Hamás Yahya] Sinwar por el asesinato de los seis rehenes. Llamamos a los ciudadanos de Israel a romper la huelga salvaje y peligrosa de la Histadrut, a ir a los lugares de trabajo y demostrar al mundo entero que el pueblo de Israel vive».

La organización nacional de coordinadores de seguridad civil de la Histadrut declaró: «Miles de coordinadores y miembros de los escuadrones de emergencia no se someterán a los dictados políticos y no harán huelga mañana.»

El ministro israelí de Finanzas, Bezalel Smotrich, insistió en que los trabajadores ignoraran la convocatoria de huelga general de la Histadrut, y dijo que no cobrarían si decidían sumarse a la huelga.

Bar-David estaba «cumpliendo el sueño de Sinwar», acusó Smotrich, «y en vez de representar a los trabajadores israelíes está decidiendo representar los intereses de Hamás».