El jefe del Shin Bet, Ronen Bar, presenta una declaración jurada ante el Tribunal Supremo de Israel en la que alega mala conducta del gobierno

El director del Shin Bet, Ronen Bar, ha presentado hoy lunes una declaración jurada ante el Tribunal Superior de Justicia en respuesta a las peticiones de destitución, en la que formula graves acusaciones contra el primer ministro Benjamin Netanyahu y su gobierno. La dramática declaración jurada de Bar ha causado sensación dentro y fuera del sistema político y ha suscitado reacciones especialmente duras.

El jefe del Partido Democrático, Yair Golan, calificó la declaración jurada de Bar de «grave acusación y advertencia de emergencia para la democracia israelí», señaló con dedo acusador a Netanyahu y expresó su apoyo al jefe del Shin Bet: «Es una amenaza directa a la seguridad de Israel y a la existencia misma del Estado tal como lo hemos conocido. Apoyo a Ronen Bar por su firmeza y lealtad al país».

El Movimiento por un Gobierno de Calidad en Israel declaró que las acusaciones de Bar demuestran que «Netanyahu no es apto» para ejercer de primer ministro y pidió que se hicieran públicas las declaraciones juradas completas. «La declaración jurada contiene revelaciones extremadamente graves sobre los intentos del primer ministro y su oficina de utilizar el Shin Bet para fines indebidos», dijo el presidente del movimiento, Eliad Shraga.

Likud MK Moshe Saada también se refirió a la fuerte declaración jurada de Bar y dijo que Bar está sufriendo de «confusión moral.» En una entrevista con Liat Regev en el programa 'Bachatzi Hayom' de Kan Reshet Bet, Saada añadió: «El jefe de una agencia de seguridad no entiende que está subordinado al gobierno. Está confundido, no es un político. Está librando una batalla de retaguardia y, al final, dentro de dos o tres semanas ya no estará en el servicio, y al no anunciar una fecha para su dimisión, está ahondando la fractura social. Tiene derecho a decir lo que quiera».

«Qatargate», 7 de octubre, y peticiones ilegales: Lo más destacado de la declaración jurada de Bar

En la declaración jurada publicada hoy, Ronen Bar afirmó que el Primer Ministro había solicitado el uso de herramientas del Shin Bet contra los líderes de las protestas contra el gobierno, incluso en casos en los que, según él, no había ningún aspecto clandestino ni amenaza de violencia. Afirmó que el Primer Ministro dio instrucciones para que se vigilara a los «financiadores de las protestas». Añadió que las peticiones para utilizar las capacidades del Shin Bet contra civiles llegaban al final de las reuniones de trabajo, después de que Netanyahu hubiera pedido al secretario militar y a la mecanógrafa que manejaba el dispositivo de grabación que abandonaran la sala para que la conversación no quedara documentada.

Según Bar, también hubo un intento de presionarle para que presentara un dictamen profesional -redactado por el Primer Ministro o alguien en su nombre- en el que se afirmaba que no podía testificar en el juicio de Netanyahu por motivos de seguridad. «Me pidieron que lo presentara como un documento de posición del jefe del Shin Bet», señaló. Bar también abordó esta cuestión en su declaración jurada clasificada.

En cuanto a las investigaciones sensibles, los documentos y el asunto «Qatargate», Bar señaló que existían serias sospechas de daños significativos a la seguridad del Estado, especialmente en la segunda investigación, que se refería a los daños a las negociaciones para la liberación de rehenes y a las relaciones entre Israel y Egipto.

Bar también se refirió a las afirmaciones de que el Shin Bet tenía información previa sobre la masacre del 7 de octubre de 2023, escribiendo que se trata de «acusaciones falsas y equivalen nada menos que a una incitación organizada contra mí y contra la organización.»