Dos días «tranquilos» en el norte de Israel: El coronel de las FDI dice que Hezbolá sigue conmocionado, evaluando los daños

Tras los ataques preventivos contra unos 270 objetivos de Hezbolá llevados a cabo por las Fuerzas de Defensa de Israel el domingo, el grupo terrorista aún está evaluando los daños, declaró el martes el coronel de las FDI Anan Abbas al diario Maariv.

Aunque el grupo terrorista reanudó sus ataques diarios contra Israel a última hora del lunes, desde entonces el número de ataques ha sido significativamente menor que en las semanas anteriores a la escalada del domingo.

El martes, Abbas, jefe de control de la sala central de operaciones del Mando Norte de las FDI, declaró: «Están intentando comprender la magnitud del daño que se les ha infligido, y lo comprenderán plenamente en los próximos días. Ahora mismo, están empezando a comprender lo que pasó y cómo se desarrolló».

«Su conmoción se debe a la enorme cantidad de aviones que desplegamos simultáneamente, golpeando un número abrumador de objetivos en muy poco tiempo. También están asombrados por la precisión de nuestros ataques: cómo conseguimos alcanzar con exactitud tantos objetivos, neutralizar sus activos y hacerlo sin dañar a civiles ni causar daños colaterales», añadió Abbas.

El lunes, Hezbolá reivindicó la autoría de un ataque contra Israel, al que siguieron otros tres el martes, incluido el lanzamiento de varios drones, uno de los cuales explotó cerca de Beit Hillel.

Las FDI informaron de que un soldado había resultado herido leve en el incidente. La mayoría de los demás drones fueron interceptados y no causaron más víctimas ni daños significativos.

En respuesta, Israel llevó a cabo dos ataques selectivos contra vehículos lejos de sus fronteras, según informaron los medios de comunicación en lengua árabe.

El primer ataque tuvo como objetivo uno, o posiblemente dos, camiones cargados con misiles de Hezbolá en la zona de Baalbek, en el valle de la Bekaa. «Uno de los vehículos fue alcanzado y se oyeron varias explosiones en la zona», declaró a la AFP una fuente de seguridad libanesa.

Otra fuente dijo a Reuters que el ataque había alcanzado material militar de Hezbolá, y añadió que era «probable» que el camión transportara un lanzacohetes dañado.

Un informe no confirmado sugirió que un avión no tripulado israelí apuntó a un vehículo que circulaba por la autopista entre Beirut y Damasco, cerca de la frontera entre Líbano y Siria en el lado sirio.

Aunque se sabe que la autopista es un importante conducto para las operaciones de contrabando de armas de Hezbolá, no se confirmó el objetivo exacto del ataque.

Fuentes de seguridad dijeron posteriormente a Reuters que en el ataque murieron tres terroristas pertenecientes al grupo terrorista palestino Yihad Islámica y un terrorista de Hezbolá.

En el momento de la publicación, Israel no había comentado oficialmente los dos ataques.

El miércoles, las FDI atacaron a un escuadrón terrorista en un edificio de la ciudad de al-Adaisa, además de bombardear con artillería objetivos de Hezbolá en Sheba y Yarine.

«Desde el comienzo de la guerra, hemos llevado a cabo más de 7.000 ataques en Líbano y eliminado a más de 550 terroristas de Hezbolá, incluidos sus altos mandos», explicó Abbas.

«Nuestra misión es devolver a los residentes del norte sanos y salvos a sus hogares».