¿Quién es Hashem Safi al-Din, sucesor designado del líder de Hezbolá, Nasralla?

En las últimas semanas, Israel no sólo ha matado al líder indiscutible de Hezbolá durante unos 30 años, Hassan Nasrallah, sino que también ha eliminado gran parte de su estructura de mando.

Sin embargo, ahora Hashem Safi al-Din (también llamado Safieddine), considerado el posible sucesor de Nasralá durante las últimas décadas, ha sobrevivido a los ataques israelíes y podría estar a punto de tomar el relevo de su primo materno.

A los observadores casuales les parecerá que nada ha cambiado.

El aspecto de Safi al-Din es engañosamente similar al de su primo, desde el mismo estilo de barba y el turbante negro, que indican una ascendencia ostensible del profeta Mahoma, hasta el defecto del habla que impide a ambos pronunciar correctamente la «r».

Procedente de una familia de clérigos chiíes del sur del Líbano, en su juventud Safi al-Din cayó pronto bajo la influencia del tristemente célebre Imad Mughniyeh, uno de los miembros fundadores de Hezbolá.

Junto con su primo Nasrallah, Safi al-Din se dedicó entonces a la educación religiosa en los lugares santos chiíes, primero en Nayaf (Irak) y después en Qom, ciudad santa y centro religioso de Irán, lo que le proporcionó un primer punto de contacto directo con el régimen iraní, mecenas de Hezbolá.

Dos años después de ser nombrado sucesor de Abbas al-Musawi, que también murió en un ataque aéreo israelí, Nasralá llamó a su primo desde Qom.

En los años siguientes, Safi al-Din empezó a ocupar altos cargos en la organización.

En 1998, fue elegido jefe del Consejo Ejecutivo de Hezbolá, un puesto clave que supervisa la red de organizaciones políticas y civiles del grupo, que éste ha utilizado para reforzar su dominio sobre el país en los últimos años.

Desde esa época, se le considera el heredero de Nasralá, a pesar de que el título de vicesecretario general pertenece a Naim Qassem.

Con el paso de los años, Safi al-Din se convirtió en miembro de la mayoría de los altos órganos de gobierno de Hezbolá, incluido su Consejo de la Yihad, que dirige las operaciones militares.

A pesar de ser clérigo, sus diversos cargos en el grupo le permitieron acumular experiencia militar y política y desarrollar dotes de liderazgo que son admiradas dentro de Hezbolá.

Desde que Hezbolá se unió a Hamás en la guerra contra Israel el pasado octubre, Safi al-Din ha representado a Nasralá en el creciente número de funerales de los operativos del grupo y, en general, ha sido uno de sus rostros más públicos.

También se le considera un líder más radical dentro del grupo y ha asumido un papel destacado en la promoción de su identidad iraní y su lealtad al líder supremo iraní, Alí Jamenei.

Además de pasar años estudiando en Irán, tiene profundos vínculos familiares con el régimen. Su hijo Reza se casó con la hija de Qassem Soleimani, líder de la Fuerza Quds iraní, asesinado por las fuerzas estadounidenses en 2020.

Además, el hermano de Safi al-Din, Abdallah, es el enviado de Hezbolá en Irán y una figura clave en las operaciones de contrabando de drogas del grupo.

Safi al-Din también ha defendido y alardeado del papel de su Hezbolá en la represión de la revuelta siria junto a las fuerzas de su dictador Bashar al-Assad y ha prometido continuar la «resistencia» contra Israel y Estados Unidos.

Las estrechas conexiones de Safi al-Din con Irán y su condición desde hace tiempo de sucesor designado hacen probable que pronto ocupe el puesto de su primo Nasralla.

Sin embargo, los medios de comunicación libaneses informan de que Hezbolá podría aplazar el anuncio oficial para que el sucesor no corra inmediatamente la misma suerte que Hassan Nasrallah.