Novillas rojas en Israel - ¿Una señal del fin del mundo?

Aunque parezca una locura, unas novillas rojas de Texas han desatado teorías conspiradoras sobre el Tercer Templo, las guerras de Gog y Magog y el Armagedón, y la llegada del Anticristo. 

Sin embargo, no se trata sólo de cristianos. Incluso los comentaristas musulmanes se han alborotado por la llegada de las novillas rojas a Israel. 

Al cumplirse el centenario de la guerra de Gaza, el portavoz de Hamás, Abu Obeidah, dijo que el hecho de que los judíos "trajeran novillas rojas" a Israel era parte del motivo del ataque- la inundación de Al-Aqsa el 7 de octubre. 

Según ambos grupos, la llegada de las novillas rojas a Israel es una señal de que los judíos pronto intentarán reconstruir su Templo, posiblemente incluso destruyendo la Cúpula de la Roca y la mezquita de Al Aqsa, para preparar la llegada del Mesías. 

Algunos evangélicos estadounidenses están entusiasmados con las novillas rojas, pues creen que su llegada señala la segunda venida de Yeshua (Jesús). 

Comentaristas de vídeo en YouTube y escritores de blogs de todo el internet han calificado a las novillas rojas como el cumplimiento de la profecía judía y han hablado del "sacrificio" de una novilla roja durante la Pascua antes de la reconstrucción del Templo. 

Pero, ¿es la historia de estas novillas rojas motivo de preocupación?

No creo que la presencia de estas novillas rojas sea prueba de una conspiración sionista oculta, ni es algo que deba excitar o preocupar en exceso a los fieles discípulos de Yeshua. 

En primer lugar, veamos una rápida historia del significado de las novillas rojas en el sistema bíblico de sacrificios y purificación establecido en la Torá. 

En el sistema bíblico, el Tabernáculo, y luego el Templo de Jerusalén, eran lugares donde la presencia de Dios descansaba de forma física entre su pueblo. En la porcion biblica de los judios conocida como Parashat Terumah (Éxodo 25:1-27:19), Dios expresó su deseo de vivir entre su pueblo. 

"Y que me hagan un santuario, para que yo habite entre ellos". (Éxodo 25:8) 

Muchas de las leyes de la Torá (Los primeros cinco libros de la Biblia) se refieren a la cuestión de la pureza. De hecho, la mayor parte del libro de Levíticos trata sobre el tema de la pureza. Uno tenía que estar en un estado de pureza ritual para entrar en el Tabernáculo o en el Templo. Los sacerdotes tenían que mantener la pureza ritual para llevar a cabo sus servicios, y los visitantes del Templo tenían que alcanzar un estado de pureza ritual para poder entrar en los atrios del Templo. 

En Números 19:1-10, vemos los reglamentos para hacer el agua de purificación, que se utiliza para limpiar a las personas, los lugares y los objetos antes de que lleguen a la presencia de Dios. 

En ese pasaje, vemos que la novilla roja debe ser "una novilla roja inmaculada en la que no haya ningún defecto y sobre la que nunca se haya colocado un yugo". (Números 19:2)

Tiene que ser sacrificada "fuera del campamento" [o ciudad]. (Números 19:3) 

La novilla tiene que ser quemada en su totalidad, junto con el hisopo, la madera de cedro y el hilo escarlata. (Números 19:5-6). 

Las cenizas de la novilla se toman entonces para hacer el "agua de purificación", utilizada para purificar a quien está ritualmente impuro y para purificar el santuario mismo. (Números 19:9) 

Según esa interpretación de la pureza ritual, si el pueblo judío desea reconstruir el Templo de acuerdo con las instrucciones de la Torá, entonces debe incluir el agua de purificación ordenada por la Torá. 

Aunque en la actualidad existe un movimiento para conseguir apoyo para la reconstrucción del Templo, sigue siendo una pequeña parte de la sociedad israelí. Sin embargo, tras los atentados del 7 de octubre de Hamás, se ha producido un aumento en la espiritualidad en Israel, y el apoyo al retorno del sistema del Templo podría crecer aún más en los próximos años. 

La pregunta, sin embargo, es ¿por qué se trata de un asunto tan controvertido? 

Una respuesta, entre muchos comentaristas cristianos y musulmanes, es que la presencia de las novillas rojas es una prueba de que los judíos planean reconstruir el Templo en el Monte del Templo en un futuro próximo. 

Esto sería problemático, porque la mayoría de los historiadores y arqueólogos creen que el Monte del Templo, donde actualmente se encuentran la Cúpula de la Roca y la mezquita de Al Aqsa, es el lugar donde se erigieron el Primer y el Segundo Templo. Por lo tanto, un plan para reconstruir el Templo indicaría una aparente voluntad de destruir uno de esos lugares o ambos o, al menos, de construir un centro de culto judío en una zona que ha estado reservada al culto musulmán durante al menos los últimos mil años. 

Para apoyarse, quienes están preocupados señalan la tradición judía rabínica, que se remonta al menos a la época de Maimónides, que dice que sólo se han matado nueve novillas rojas para el agua de la pureza entre la época de Moisés y la destrucción del Segundo Templo, y que la décima novilla roja será utilizada por el Mesías. 

"...la décima novilla roja será cumplida por el rey, el Mesías; que se revele pronto, Amén, que sea la voluntad de Di-s", escribió Maimónides en su comentario sobre la Mishná. 

Tomado junto con la creencia entre algunos judíos de que sólo el Mesías puede construir el Tercer Templo, se podría entender la preocupación entre parte de la población musulmana, ya que indicaría que al menos algunos judíos esperan la pronta venida del Mashiaj (Mesías) y la reconstrucción del Templo en el Monte del Templo. 

Pero, ¿hay algo más en esta preocupación entre la comunidad musulmana que un simple temor por el destino de la Cúpula de la Roca? ¿Hay algo en esta historia que haga temer el fin del mundo y la llegada del mesías islámico, el Mahdi, junto con la llegada del anticristo islámico, el Dajjal? 

¿Qué dicen algunos musulmanes sobre las novillas rojas y qué relación tiene con el conflicto que se está produciendo ahora mismo en Israel? 

Algunos musulmanes que se centran en una comprensión apocalíptica del final de los tiempos descrita en la literatura musulmana, extraída de una mezcla de pasajes del Corán, los hadices y el Tafsir (comentario sobre el Corán), creen que la venida de la figura mesiánica islámica, llamada el Mahdi, está relacionada con la suerte de los judíos en la tierra de Israel. 

En esto, comparten muchos puntos en común con ciertos grupos de cristianos evangélicos que se centran más en la escatología (el estudio de las postreras cosas) que en otras partes de las Escrituras. 

Al igual que muchos de esos cristianos evangélicos esperan un regreso de los judíos a la tierra de Israel y una reconstrucción del Templo como signos de la Segunda Venida de Yeshua, precedida por la venida de una figura conocida como el anticristo, estos grupos de musulmanes esperan un regreso de los judíos a la tierra, incluyendo un aumento temporal del control judío sobre la tierra y la opresión de los musulmanes de la zona, antes de la venida del Mahdi y de la correspondiente figura del anticristo conocida como el Dajjal. 

Según muchos de estos musulmanes, hay tres signos que esperan ver antes de la venida del Dajjal, el Mahdi y la subyugación definitiva del mundo al Islam. Estos signos se basan en pasajes del Corán (uno de los cuales es la sura 17:7) tal y como se interpretan en el Tafsir.

Esos signos, según el Sheij (lider) Ustadh ( maestro) Wahaj Tarin, son los siguientes: la humillación de los musulmanes por parte de los judíos (al menos de los musulmanes que viven en la vecindad de los judíos); la entrada en la Masjid (mezquita) por parte de los judíos -lo que se interpreta como la mezquita de Al Aqsa-; y la destrucción de lo que se ha construido (interpretado como la Cúpula de la Roca o las ciudades musulmanas de la tierra). 

Aunque no deseo entrar en la base de estas creencias, ya que interpretar el Corán es notoriamente difícil, incluso para los eruditos árabes, quiero examinar cómo afectan estas creencias a algunos en el mundo musulmán, que también se inclinan cada vez más en una dirección apocalíptica y escatológica, al igual que muchos evangélicos. 

Entre muchas de las interpretaciones que investigué, algunos musulmanes esperan que la llegada del Dajjal (la figura del anticristo en la escatología islámica) sea una señal bien recibida por los judíos. Un erudito dijo incluso que el Dajjal sería aceptado por los judíos como su Mesías. Él vinculó este entendimiento a la declaración profética de Maimónides, diciendo que la venida del Dajjal sólo podría ocurrir después del sacrificio de la décima novilla roja. Esto es similar a la forma en que algunos evangélicos esperan que el sacrificio de la novilla roja y la reconstrucción del Templo sean necesarios para la venida del Anticristo, como se predijo en el Libro de Daniel, el Libro del Apocalipsis, las enseñanzas de Jesús y las enseñanzas de Pablo. 

Sin embargo, varios de estos maestros de la profecía del Islam, creen que la matanza de la novillas rojas irá seguida de algún tipo de levantamiento judío que destruirá la mezquita de Al Aqsa. 

Abdullah Hakim Quick expresó un malentendido musulmán común cuando dijo: "Encima del Templo (de Salomón) está el Majid al-Aqsa (la mezquita de Al Aqsa)". En realidad, la mezquita de Al Aqsa no se encuentra sobre el lugar del Templo, sino donde solían estar los atrios exteriores. La Cúpula de la Roca está situada sobre el lugar donde estuvo el Templo. 

El jeque (líder) Abdullah Quick afirmó que los judíos religiosos creen que si realizan el sacrificio de las novillas rojas (que no es realmente un sacrificio en términos bíblicos), aparecerá el Mashiaj (Mesías) para conducir a los judíos al dominio de la tierra. 

La atención prestada a los judíos en el Corán y en la escatología del Islam ha desconcertado incluso a los pensadores islámicos. Un erudito, Hassan Mneimneh, escribió sobre los judíos en un artículo sobre la reinterpretación moderna de los textos clásicos del Corán. 

"Si la gran cantidad de espacio asignado a Banu Isra'il y al Yahud de Yathrib [dos grupos judíos] en el Corán es principalmente historia, en lugar de parábolas de sabiduría moral, el Corán se reduce en gran medida a un libro centrado en los judíos". 

Él continuó: "Los teólogos populares y escolásticos han recurrido recientemente a una demonización de los judíos para racionalizar el amplio espacio que ocupan sus relatos en el Corán". 

Él afirma que este enfoque explica el papel desproporcionado que tienen los judíos en los movimientos yihadistas modernos. 

"Estas nuevas interpretaciones teológicas de los judíos como únicos malvados y merecedores de un castigo desproporcionado se desarrollan en el escenario político moderno". 

En la conclusión de su artículo, Él escribe: "De hecho, tanto la retórica pública como las acciones de Hezbolá, Hamás, la Yihad Islámica Palestina, o incluso en el omnipresente eslogan de los remotos Ansarullah (Huthis) en Yemen -que proclama 'Muerte a América, Muerte a Israel, Malditos sean los judíos'- demuestran la creencia generalizada de los grupos yihadistas de que los judíos como colectivo son intrínsecamente malvados y, por tanto, potencialmente susceptibles de ser eliminados." 

Mneimneh vinculó este entendimiento a la profecía -común entre muchos grupos yihadistas- de que el sometimiento del mundo al Islam depende de la derrota de los judíos. Algunos de los jeques y comentaristas islámicos que investigué afirman que hasta que los judíos no sean derrotados como poder político y religioso, la Ummah (comunidad) musulmana no podrá extender el Islam a todos los pueblos. 

Aunque algunos musulmanes creen que el regreso de Jesús hará que los judíos abandonen su religión y se conviertan al Islam, esa opinión parece ser minoritaria entre las interpretaciones yihadistas. 

Más común es la opinión expresada en el hadiz de Sahih Muslim

"El Profeta dijo... La última hora no llegará hasta que los musulmanes luchen contra los judíos y los musulmanes los maten hasta que los judíos se escondan detrás de una piedra o un árbol, y una piedra o un árbol diga: Musulmán, o siervo de Alá, hay un judío detrás de mí; ven y mátalo". 

[Este hadiz se citaba en la carta original de Hamás]. 

Lo que resulta preocupante, en el bombo y platillo sobre las novillas rojas en muchos vídeos, blogs y podcasts cristianos y musulmanes, es el papel central otorgado a la supuesta maldad inherente de los judíos, así como el enfoque en los supuestos planes nefastos de los judíos de sacrificar una novilla roja para provocar la destrucción de la mezquita de Al Aqsa. 

Esto demuestra que entre algunos elementos extremistas, una interpretación antisemita de los acontecimientos actuales, unida a una visión antisemita de la escatología, dirige el debate. No se concede al pueblo judío el derecho a aspirar a una restauración de su patria y de su sistema religioso. En su lugar, todo se arroja bajo una luz oscura, nefasta y satánica. 

Para los que profesan la fe cristiana, ésta es una posición peligrosa. Los profetas advierten que en los últimos días, Dios hará de Jerusalén una controversia en el mundo (Zacarías 12:3). Será Su instrumento para destrozar a las naciones (Salmo 2:9). Sin embargo, esto será el precursor de que Él se volverá hacia Israel en amor pactado, rescatará a Israel de la ira de las naciones (Zacarías 12:9 y 14:3) y volverá los corazones de Israel y de las naciones hacia su Rey Ungido (12:10-14).