En un mensaje dirigido a la comunidad internacional, Netanyahu afirma que «ningún país puede aceptar el lanzamiento de cohetes contra sus ciudades».

En un breve mensaje de vídeo en inglés, dirigido a la comunidad internacional, el primer ministro Benjamin Netanyahu explicó por qué Israel no puede retroceder en su conflicto contra el grupo terrorista Hezbolá.

Refiriéndose al inicio de la guerra de Gaza con la brutal masacre de Hamás el 7 de octubre, el primer ministro declaró que Hezbolá entró en la guerra un día después, «completamente sin provocación», y comenzó a disparar cohetes contra comunidades del norte de Israel.

«Hezbolá atacó Israel completamente sin provocación», dijo Netanyahu. «Dispararon misiles y cohetes contra nuestras ciudades. Hicieron que 60.000 israelíes abandonaran sus hogares a lo largo de la frontera con Líbano, convirtiéndose en refugiados en su propia tierra.»

Netanyahu hizo hincapié sobre el hecho de que los ataques con cohetes no han cesado desde aquel día.

«Ningún país puede aceptar el lanzamiento gratuito de cohetes contra sus ciudades», declaró el primer ministro. «Nosotros tampoco podemos aceptarlo. Tomaremos las medidas que sean necesarias para restablecer la seguridad y devolver a nuestra gente a salvo a sus hogares.»

El mensaje de Netanyahu parece dirigido a la comunidad internacional, que ha estado presionando a Israel para que no recrudezca la situación contra Hezbolá, a pesar de los constantes bombardeos del grupo terrorista contra las comunidades fronterizas del norte de Israel.

En los últimos días, el primer ministro ha criticado más abiertamente a los países extranjeros, y en una entrevista reciente con el Daily Mail criticó al gobierno laborista del Reino Unido.

El presidente Isaac Herzog habló recientemente con la cadena británica Sky News, donde expresó un sentimiento similar. Herzog también apareció para atribuir parte de la culpa de la situación actual principalmente a los países occidentales que han pedido constantemente a Israel que ejerza «moderación.»

«Seguimos teniendo moderación y moderación y moderación, pero algo tiene que terminar», afirma Herzog. «Tenemos que devolver a nuestros ciudadanos a sus hogares. Esa es la obligación más natural de cualquier nación para con sus ciudadanos.»

Herzog también repitió un mensaje compartido por los líderes de las FDI tras los ataques en Líbano que mataron a varios comandantes durante el fin de semana.

«Todos estos líderes que fueron erradicados el viernes por el ataque israelí, todos estos líderes estaban reuniéndose para lanzar el mismo ataque horrible y horrendo que tuvimos el 7 de octubre por parte de Hamás, quemando a israelíes, masacrándolos, violando a sus mujeres, secuestrando y tomando como rehenes a ancianos y jóvenes, y a bebés pequeños», afirmó Herzog.

En una rueda de prensa a los medios israelíes, el portavoz de las FDI, general de brigada Daniel Hagari, dijo el sábado por la noche: «Ayer, en un ataque selectivo en Beirut, eliminamos a Ibrahim Aqil, jefe de la Unidad de Operaciones de Hezbolá, junto con 15 comandantes de la unidad de élite Radwan de Hezbolá».

Los comandantes se habían «reunido en el corazón del barrio de Dahiyeh, en Beirut, al amparo de la población civil. Se reunieron para planear atentados terroristas e infiltraciones en territorio israelí, pero sabíamos dónde estaban y nos adelantamos a ellos, eliminándolos en una precisa y poderosa operación llevada a cabo por la Dirección de Inteligencia y la Fuerza Aérea israelí.»

El sentimiento creciente entre los analistas militares y los antiguos líderes militares en Israel es que las FDI tendrán que emprender acciones más significativas contra Hezbolá, posiblemente incluyendo otra incursión limitada en el Líbano, con el fin de eliminar el actual estado de amenaza y lograr el regreso seguro de los evacuados a sus hogares en las comunidades del norte.

Cada vez hay más indicios de que Israel se está preparando para hacerlo en las próximas semanas.