25.000 personas acompañan a las familias de los rehenes en la manifestación central en Jerusalén

La marcha de protesta por el regreso de los rehenes tomados por los terroristas de Hamás en la Franja de Gaza culminó el sábado con una manifestación central en Jerusalén.

Las familias de los rehenes encabezaron la marcha que comenzó el martes por la noche en Tel Aviv con la exigencia del retorno inmediato de todos los rehenes que fueron secuestrados de Israel a la Franja de Gaza el 7 de octubre. 

Más de 25.000 personas se unieron a las familias en la última etapa de la marcha y en la manifestación central frente a la Oficina del Primer Ministro en Jerusalén, entre ellas el líder de la oposición y del partido Yesh Atid, Yair Lapid, y su esposa. 

La última etapa de la marcha comenzó en Ein Hemed, donde miles de personas se unieron a las familias de los rehenes para recorrer los últimos kilómetros hasta Jerusalén. 

Los residentes de las comunidades colindantes a la autopista 1 les aclamaron, ondeando banderas y carteles de apoyo. 

"Vamos camino de la Knesset en Jerusalén para pedir que devuelvan a los rehenes a casa", dijo uno de los participantes a ALL ISRAEL NEWS. 

"El gobierno debe hacer todo lo posible para devolvérnoslos, a casa, sanos y salvos", añadió. 

Más tarde, por la noche, se celebró otra concentración cerca del Museo de Arte de Tel Aviv, en una plaza rebautizada "Plaza de los Rehenes".

Una de las exigencias de la marcha fue que los principales políticos del país se reunieran con las familias de los rehenes y les dijeran cómo pensaban devolver a los rehenes, en medio de los crecientes informes de la semana pasada sobre un acuerdo de rehenes que liberaría a 50 mujeres y niños. 

Los ministros Benny Gantz y Gadi Eisenkot accedieron a reunirse con ellos el sábado, mientras que los demás miembros del gabinete de guerra no respondieron a la petición. 

Uno de los organizadores de la marcha, Yuval Haran, admitió que, a pesar de que aún no se ha alcanzado el objetivo principal de liberar a los rehenes, la marcha logró otras metas. 

"Hemos sacado una fuerza enorme de la gente que se ha unido a nosotros en nuestra marcha, así como de quienes nos han estado animando", declaró Haran a Times of Israel. 

El padre de Haran, Avshalom, fue asesinado, mientras que su madre, Shoshan, de 67 años, y otros seis miembros de su familia fueron secuestrados por los terroristas el 7 de octubre.