10 niños y jóvenes muertos y muchos heridos graves por un cohete de Hezbolá que impactó en un campo de fútbol de un pueblo druso del Golán

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Al menos diez niños y jóvenes, la mayoría de edades comprendidas entre los 10 y los 20 años, murieron, y docenas más resultaron gravemente heridos, por el impacto de un cohete disparado por Hezbolá en un campo de fútbol de la localidad de Majdal Shams, en los Altos del Golán, el sábado por la noche.

Según el servicio de rescate Magen David Adom (MDA), grandes fuerzas de rescate, incluidas ambulancias y helicópteros, acudieron a la localidad drusa de Majdal Shams.

Al menos 29 personas resultaron heridas en el atentado, de las cuales 10 sufrieron heridas críticas y fallecieron horas después del ataque. Además, la MDA dijo que otros seis heridos se encontraban en estado grave, tres en estado moderado y cuatro en buen estado. Otros seis fueron tratados por shock.

Al menos 30 personas murieron o resultaron heridas en el ataque, lo que lo convierte, con diferencia, en el incidente más grave ocurrido en el frente norte de Israel durante la actual guerra hasta el momento.

El paramédico Idan Avshalom dijo: "Llegamos a un campo de fútbol y vimos destrucción, objetos en llamas. Las víctimas estaban tendidas en la hierba, escenas muy difíciles, inmediatamente empezamos a clasificar a las víctimas, algunos de los heridos fueron llevados a clínicas locales y nuestros equipos fueron dirigidos a las clínicas también."

"Durante el incidente se produjeron alertas adicionales y el tratamiento médico de las víctimas sigue en curso", añadió.

Majdal Shams se encuentra a unos 6 km de la frontera libanesa, por lo que sus habitantes no han sido evacuados, a diferencia de las decenas de miles de habitantes de las ciudades situadas más cerca de la frontera.

Las Fuerzas de Defensa de Israel declararon posteriormente que sus soldados y helicópteros estaban ayudando en las labores de rescate y evacuación de la ciudad.

Un funcionario israelí dijo a los medios de comunicación que el primer ministro Benjamin Netanyahu estaba siendo informado de los detalles del incidente y que estaba celebrando una consulta de seguridad.

Netanyahu seguía en Estados Unidos como parte de su visita de Estado, tras prolongar su estancia para poder reunirse con el expresidente Donald Trump. Esto obligó a que permaneciera en EE UU durante el fin de semana, ya que los líderes israelíes no suelen viajar durante el Sabbat judío.

Los medios israelíes informaron de que el equipo del primer ministro decidiría si regresaba a Israel durante el Sabbat tras una próxima llamada telefónica con el ministro de Defensa.

Tras las críticas por no haber decidido inmediatamente regresar a Israel ante el peor incidente desde el inicio de la guerra, la oficina de Netanyahu declaró que regresaría antes.

"Inmediatamente después de conocer la catástrofe, el primer ministro Benjamin Netanyahu ordenó que su regreso a Israel se adelantara lo más rápidamente posible", declaró la Oficina del Primer Ministro.

Tras las primeras reuniones de los altos mandos del ejército, las FDI declararon que se estaban preparando para responder al ataque de forma significativa. El ejército también dijo que el cohete era aparentemente de un tipo especialmente pesado, y que la Fuerza Aérea investigaría por qué no fue interceptado.

Las FDI subrayaron además que, según los servicios de inteligencia disponibles, el lanzamiento fue llevado a cabo por Hezbolá. El grupo terrorista negó cualquier implicación en el incidente en una declaración inusual de su tipo a primera hora de la tarde.

"Hezbolá está detrás del lanzamiento del cohete que impactó en el campo de fútbol de Majdal Shams y causó muchas víctimas, sólo civiles, incluidos niños, a primera hora de esta tarde", reiteraron las FDI.

El cohete mortífero formaba parte de varias descargas pesadas dirigidas contra la Alta Galilea y los Altos del Golán el sábado por la tarde. Hezbolá reivindicó la autoría de 12 ataques distintos a lo largo del día, una cifra superior a su media diaria de las últimas semanas.

Una primera remesa de unos 30 cohetes dirigida contra la Alta Galilea y los Altos del Golán fue parcialmente interceptada, declararon las FDI.

Más tarde se disparó otra tanda de unos 10 cohetes contra la zona de Nevea Ativ, que cayeron en zonas abiertas, antes que se disparara el cohete mortal contra Majdal Shams.

Los intensos ataques con cohetes se produjeron tras un ataque de las FDI en el sur del Líbano que, según informes libaneses, causó la muerte de cuatro agentes de élite de las Fuerzas Radwan de Hezbolá.

Soldados del 869 Batallón de Inteligencia de Campo de las FDI habían visto a un terrorista entrando en un complejo militar que incluía un depósito de municiones en la zona de Kafr Kila y luego dirigieron aviones de combate para atacar el edificio.

Ese mismo día, Hezbolá había lanzado dos drones contra la zona de Yiftah y disparado dos cohetes contra Shtula. Los ataques no causaron heridos ni daños.